sábado, 22 de octubre de 2016

Crónica de una Fuga Anunciada

Y no, esta vez no me refiero a la tercera fuga del Chapo, que cualquier día de estos podrá acontecer. Hablo de la de Javier Duarte, gobernador con licencia de Veracruz. Apenas la PGR había logrado una orden de aprehensión cuando descubrieron que ¡Oh sorpresa, Javier Duarte se había esfumado! Y vaya que resultó una sorpresa para las autoridades, ya que para el resto de la población era algo que sabíamos que iba a suceder. Y es que, seamos sinceros ¿quién de nosotros esperaría sentado en su casa a que llegara la PGR a buscarlo? Digo, si aún y cuando fuéramos inocentes lo haríamos sin antes tener un amparo, menos si sabes que eres culpable. Hasta Jean Valjean se escudó en el alias del Señor Magdalena para evadir a Javert.

El actuar de Duarte es normal. Sería muy tonto si hubiera procedido de otra forma. Sin embargo el papel de la PGR sí que deja mucho que desear, o al menos despierta bastantes dudas. Porque, si de antemano sabes que se te va a pelar en cuanto pierda el fuero, pues entonces le pones vigilancia día y noche, cercas las cuadras de alrededor y vigilas que Gamboa Patrón no aterrice su helicóptero en algún lugar cercano.

Al respecto, si bien no fue en un helicóptero, para evitar dañar otro arrecife, se rumora que, efectivamente, Gamboa Patrón lo ayudó a escapar y lo mantiene escondido en una casa en ¿dónde creen? ¡sí, el Estado de México! ¿será coincidencia?

Pero bueno, volviendo a la PGR, y citando a un clásico, hay mucho sospechosismo. ¿De verdad son tan ineptos que no saben hacer bien su trabajo o más bien recibieron línea de arriba para dejarlo escapar? Y el asunto se complica porque, si bien si Osorio Chong decidiera atraparlo, aún en contra de los deseos del Presidente, y eso le ganara puntos ante la sociedad, le restaría muchos dentro de su partido, por haber roto la “lealtad partidista”, y en tiempos pre-electorales eso podría ser un suicidio político.


Lo que sí queda claro es que Enrique Peña Nieto ya se parece a Fidel Castro: todo mundo se le escapa. Primero el Chapo, después Moreira (aunque después fue atrapado para que, vergonzosamente, fuera exonerado al poco tiempo). Le siguen Padrés y ahora Duarte, ¿se sumarán el otro Duarte, César, de Chihuahua y Borge, de Quintana Roo? Para no hacer el ridículo la PGR tiene dos opciones: o los vigila para que no escapen o no giran ninguna orden de aprehensión, exonerándolos, y así nos evitamos los gastos que su búsqueda implica.

viernes, 21 de octubre de 2016

La Medalla Belisario Domínguez DEBE ser para Gonzalo Rivas


Luis González de Alba pugnó, hasta su última columna que la medalla Belisario Domínguez, que se entrega a los mexicanos que han servido a la Patria o a la Humanidad, fuese para Gonzalo Rivas Cámara, el ingeniero que perdiera la vida al apagar el incendio que, en el 2012, provocaron estudiantes normalistas de Ayotzinapa. Con su acción salvó la vida de cientos de personas que se encontraban atrapadas en la manifestación de dichos normalistas, y de pasada salvó a esos ¿inconscientes o malvados? que provocaron el incendio.

La verdad, merecido se la tiene, ya que es un verdadero héroe. Sin embargo, el abogado de los padres de los 43 normalistas desaparecidos,  Vidulfo Rosales, se opone, junto con la CNTE y Morena (qué raro), a que se le entregue a Gonzalo, ya que eso sería “criminalizar a los estudiantes”.

En primer lugar, cómo alguien que se llame Vidulfo se atreve a opinar. Con ese nombre debería estar oculto, avergonzado de la irresponsabilidad de sus padres, o al menos, haber tramitado un cambio de nombre.  Por si su nombre fuera poco, hace falta ser muy ignorante o muy mala leche para enunciar que se “criminaliza a los estudiantes”. O sea ¿no cometieron un acto vandálico, o es que en su pueblo es de lo más normal quemar gasolinerías? Además, los criminales, quisiera creer, fueron otros normalistas, distintos de los 43 desaparecidos. ¿Entonces en dónde está la relación? Es un hecho que las autoridades deben de investigar quiénes fueron los asesinos de Gonzalo Rivas y castigarlos de acuerdo a derecho. No por ser normalistas pueden estar por encima de la ley.


A los senadores les pedimos que dejen fuera “costos políticos” y se sacudan el miedo de tocar a los intocables normalistas. Yo sé que el Negro Iñárritu puede ser una salida fácil, ya que a muchos dejaría contentos sin meterse en líos políticos, pero, sinceramente, no sería lo correcto.

jueves, 6 de octubre de 2016

¿Fue debate?


¿Viste el debate? Fue la pregunta que corría por todos lados la semana pasada.  La verdad yo no lo vi. En primer lugar porque corresponde a una elección en la que yo no tengo voto. Sí, argumentarán algunos, pero el resultado de dicha elección es crucial para el futuro de México ¿de verdad? Desde que tengo memoria siempre he escuchado lo mismo; que si gana fulanito va a ser mejor para México. Presidentes gringos van, presidentes vienen, y yo no veo en qué nos beneficia uno u otro. Creo que desde Carter, ningún presidente yanqui ha traído algo benéfico al país, y quizás con Carter mi candidez infantil me esté nublando mis recuerdos. Incluso mucho se especuló con Obama y sólo fueron ilusiones.

Y en segundo lugar, igual a lo que pasa en el país, lo que se transmitió no fue un debate, sino un circo a tres pistas, donde el entretenimiento de los payasos corrió a cargo de Trump.

Y no nos ilusionemos, que nuestros propios debates no cantan mal las rancheras. Nuestro acartonado formato no queda excento del mismo espectáculo, tipo Reality show, en el que el candidato que más difamó, el que más gesticuló y el que se hizo el ofendido resulta el ganador a los ojos de los telespectadores, lo cual nos muestra, no sólo la baja calidad de nuestros políticos, sino de la población en general. Resulta patético, por usar un eufemismo,  que lo más recordado de Gabriel Quadri en el debate de 2012, haya sido que le miró las pompas a la edecán, cuando fue el único de los cuatro que se dedicó a plantear sus propuestas y a criticar las ideas de los demás, no a las personas. Eso es debatir, lo demás son payasadas.

Seguramente sí me chutaré los debates para la elección de 2018, ya que el ganador de la elección va a influir, para bien o para mal el destino de mi país. Seguramente tampoco será debate. A nuestros políticos “les hace falta ver más bax”. Además estoy seguro que el show de los payasos correrá a cargo de más de uno. Y, finalmente, la razón principal es que necesitaré material para mi blog.

Luis González de Alba


Descanse en paz. Interesante columnista que no se dejaba deslumbrar por el destello, casi divino, que el Amado Líder de la izquierda mexicana insiste en radiar a su alrededor, provocando la ceguera de sus seguidores. Lamentablemente descubrí sus columnas muy tarde. Nos hará mucha falta su pluma crítica.

Censura en FB


Estimados censores de Facebook:

Les dedico esta entrada porque, la verdad, no entiendo por qué me han vuelto a censurar. El problema es que ustedes no se dignan a darme una respuesta.

La primera vez lo atribuí a que atacaba a Carmen Aristegui, lo cual, aunque incongruente, podía entenderlo, vaya pues, que había una razón ¿pero en esta ocasión? No suelo usar palabras altisonantes ni hago revueltas para derrocar al régimen. De hecho, curiosamente, cuando critiqué a Peña no sufrí censura alguna. Todo parece indicar que el deporte preferido es “pégale al presidente”, y ahí sí, todos felices y contentos.

En la entrada censurada recientemente, lo más grave que usé fue “los descerebrados que condenaron a Emma…”, y ahora que lo pienso, quizás ahí estuvo su enojo. A lo mejor el encargado de la censura de su plataforma haya sido uno de estos descerebrados.

Quizás me equivoco y el motivo fue más altruista. Querían detener este linchamiento que se desató en contra de la pobre de Emma, y estoy de acuerdo, claro, si mi entrada hubiese sido una piedra más en contra de ella. Pero bastaba leer mi comentario al post, en el que explicaba que no ponía foto por respeto a la víctima para entender que mi escrito no iba por ahí, al contrario. Además, si piensan censurar algo, al menos tómense la molestia de leerlo.

Por otro lado, no sé como tomarlo, si como un halago o como una afrenta, después de todo, sin temor a exagerar, me elevan al nivel de Joyce, Boccaccio o Rushdie, todos ellos autores censurados, aunque bueno, la verdad sí estoy exagerando. De cualquier forma preferiría ser comparado con  Whitman o alguno de los poetas malditos, como que tiene más caché.

Aunque, bueno, siendo sinceros, soy un malagradecido. Gracias a su censura dicha entrada rebasa las mil visitas ¡Todo un record! Seguramente lo que ustedes quieren es hacer famoso mi blog y poder monetizarlo . Todo es por mi bien, y yo aquí criticándolos sin razón. Ustedes perdonen pero me dejé llevar.

Paraolímpicos

Terminaron los Juegos Paraolímpicos, y México ocupó un lugar destacado. Consiguieron apenas una medalla de oro menos que el total de medallas que consiguieron los Olímpicos, que por cierto, ninguna fue de oro.
Como reflejo de la mala administración de Castillo al frente de la CONADE estos juegos Paraolímpicos tampoco fueron de las mejores participaciones. De hecho, si eliminamos las del 72, que fueron las primeras y enviamos sólo 7 atletas, estos son los terceros peores resultados, pero si a los Santos los santifican, a las ratas las ratifican, y Castillo fue ratificado en su puesto.

¿Pero por qué nos va mejor en los paraolímpicos? Es lógico. En México el gobierno Federal, el Estatal y hasta el Municipal apoyan al deporte paraolímpico. Basta ver el estado tan lamentable de las banquetas por las que circulan a diario dichos atletas. Con tanto entrenamiento, lo mínimo que podían hacer es ganar.