martes, 31 de enero de 2017

¿Y tú no vas a poner la bandera en tu foto de perfil?


Es lo que me preguntan al ver que, a pesar de que me la mandaron, sigo con mi foto de siempre. La verdad, dudo mucho hacerlo.

En primer lugar, no me gustan los cambios. Nunca he puesto la bandera de Francia, ni ninguna otra en mi foto de perfil, y no por falta de empatía con esas tragedias, pero creo que esa acción no hace ninguna diferencia, que es activismo de Facebook. Además es desagradable ya no poder reconocer quién escribió qué porque todos traen la misma foto, así que, si me albureo a mis amigas sepan que es porque las confundí con un amigo; y si le mando besos a uno de ellos, no es que ahora batee de zurda, sino porque creí que era una amiga.  Lo que me lleva al siguiente punto.  No me gusta parecerme a los demás. Y sí, ya sé que caigo en la ironía que señala Lipoveski, que hay, habemos, algunos que no quieren que los encasillen dentro de ningún grupo, cayendo, irónicamente, en el grupo de los que no quieren pertenecer a ningún grupo.

Además dudo mucho que Trump esté en la sala oval, la sala oral de Clinton, diciendo algo así como “demonios, ya todos los mexicanos cambiaron la foto de su perfil por una bandera, creo que me pasé de lanza y esto va en serio. Es hora de pedir disculpas y rectificar”.

Por otro lado, creo que sería hipócrita de mi parte el hacerlo. En los próximos días necesito comprar unos programas que enriquecen el trabajo de un CM…y adivinen qué: son gringos. ¿Dejar FB o Twitter? Imposible, de eso vivo, y mi trabajo me obliga a comprarles publicidad, así que no sería muy congruente de mi parte poner la banderita.


Sigo sin estar muy convencido de la campaña de no comprarle a las franquicias, que si bien son de origen extranjero, el capital, los trabajos y los insumos son nacionales. Quizás a la campaña que me podría sumar es a la de no consumir refresco durante 30 días. De hecho ya casi no lo consumo, y no por patriotismo, ni siquiera por salud, sino por vanidad; el refresco me estaba subiendo de peso. Supongo que estos boicots lo que buscan es que, al ver sus ganancias disminuidas, los dueños del capital exijan un cambio en su gobierno, ya sea que Trump modere sus berrinches o bien que deje de ser presidente, utilizando el medio que sea necesario ¿estaremos en las puertas de otro magnicidio?

No hay comentarios:

Publicar un comentario